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| Foto: @delrey__ |
Sumérgete en la esencia de La Ceiba, el pueblo más destacado en la costa lacustre de Trujillo, donde la ubicación privilegiada regala paisajes y climas que contrastan con las localidades al pie de la cordillera andina.
Enmarcado por extensas sabanas de fincas ganaderas y acariciado por las aguas del lago de Maracaibo, este rincón ofrece una experiencia gastronómica única, con platos elaborados a base de los frutos de la pesca lacustre, como las cangrejas sancochadas.
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| Foto: @yumir_photography |
Con sus raíces que se remontan al siglo XVII, La Ceiba debe su nombre a la abundancia de majestuosas ceibas que adornan su entorno. Este pintoresco poblado es testigo de una vida que se teje entre actividades agrícolas, pesqueras y la histórica explotación de carbón.
En los últimos años del siglo XIX y buena parte del siglo XX, La Ceiba emergió como un puerto de gran importancia, siendo punto de encuentro del ferrocarril que se extendía desde Motatán, operativo entre 1888 y 1947.
Hoy en día, conserva el encanto de su pasado portuario con un muelle que aún recibe buques para la carga de carbón. Pasear por sus calles es sumergirse en la nostalgia de una época en la que La Ceiba era un centro neurálgico de actividad comercial y marítima.
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| Foto: Andres Eloy Bracamonte Osuna |
Descubre la historia que yace entre las calles y costas de La Ceiba, una joya que fusiona tradición, gastronomía y el legado de un puerto que sigue dejando huella en el corazón de Trujillo.
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