Fotografía de: albaciudad.org
El 28 de diciembre hay una fiesta llena de color en Venezuela. Es una celebración que se hace todos los años y que lleva por nombre las fiestas de los «Locos y locainas». También conocida como la fiesta de los santos inocentes.
Esta fiesta se celebra en los estados de Mérida, Lara, Trujillo y Portuguesa donde se disfrazan para recordar el día de los Santos Inocentes en una celebración única en el mundo.
Aunque es una tradición loca y muy divertida, es un evento socio-religioso porque se le rinde tributo a los santos inocentes, rememorando la matanza de los niños de Belén la cual fue ordenada por Herodes.
Los hombres se visten de mujeres, las mujeres de hombres, los niños de ancianos y los ancianos de niños. Cualquier cosa vale para representar la locura en la que cayeron las madres de los niños asesinados por el ejército de Herodes.
Esta costumbre venezolana tiene como objetivo hacer caer a todas las personas por inocentes, haciéndose pequeñas bromas entre amigos y familiares.
Fotografía de: noticias24carabobo.com
La parranda de locos comienza la madrugada del 28 de diciembre, asistiendo todos a misa. Luego de esto recorren las calles del pueblo acompañados de instrumentos musicales como el tambor, maracas, violín, cuatro y trompetas para hacer más divertido el recorrido.
Todos con sus trajes coloridos, donde sobresaltan las pelucas, los hombres con prendas extravagantes y femeninas. Hay quienes usan mascaras para cubrirse la cara, otros en su lugar usan franelas en mal estado con la intención de que no los reconozcan.
En su recorrido van visitando los hogares de amigos, conocidos y desconocidos, haciéndoles bromas, bailes y en algunos casos asustados a lo más pequeños de casa.
Esta costumbre se ha mantenido durante muchísimos años, desde la edad media para ser más específicos. Y son muchos los venezolanos que mantienen esta hermosa tradición de los locos y locainas.
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