Conoce los nombres de las 7 colinas

Fotografía de: @drdrone_ve

Valera, una pequeña población del estado Trujillo, convertida en una de las localidades más importantes por encima de la Capital.

Valera destaca por ser cuna de diferentes artistas como Ana Enriqueta Terán, Adriano González León y Víctor Valera Mora,  además de estar llena de modernas edificaciones como el Ateneo, Hoteles, Avenidas y el Parque de los Ilustres.

Pero uno de sus mayores logros es estar situada en un valle rodeado de siete grandes colinas,  que han ido perdiendo su verdor de montaña para sobre-poblarse y convertirse en barrios aledaños.

Cada una de estas colinas cuenta con un nombre, y aquí te presentamos las razones de estos nombres tan originales.

De Chapasalas - Trabajo propio, CC BY-SA 4.0

Colina La Concepción: su nombre se debe a que en ese lugar existían varias parteras  que eran las que atendían los partos a domicilios cuando el médico no estaba cerca o no estaba disponible. Este nombre también es aceptado en virtud a la fe religiosa y veneración a la Inmaculada Concepción de María de Nazaret.

Colina La Pollera: su nombre se debe a que cuando se inicia la expansión de la ciudad con la compra del Llano de San Pedro en ese sitio existía una granja o criadero de plumíferas, que suministraba las aves necesarias a la ciudad para el consumo doméstico.

Colina La Cruz: Desde esta cima se puede observar un 50% de la ciudad. Es la loma que se observa desde la Plaza Bolívar y que majestuosamente se levanta como gigante vigía. Su nombre se debe a que en la popa y mirando a la ciudad, fue instalada una Cruz de La Misión de unos cuatro metros de alto con el fin de venerarla cada 3 de mayo.

Colina El Cementerio: Se encuentra vía hacia Escuque y Betijoque. Es todo el cerro que bordea hacia la izquierda el cementerio municipal y que comienza colindando con Las Mercedes rumbo a la salida para La Floresta.

Colina La Cabaña: Su nombre se debe a que en tiempos de la colonia le dieron la libertad al Negro Norberto, beneficiado por su trabajo y dedicación a su amo. Como no tenía donde ir, se encaminó colina arriba y construyó para sí una gran cabaña donde vivió mucho tiempo.

Colina La Plata: Su nombre nace debido  a que toda la planicie a los pies de este cerro eran terrenos de la Gran Hacienda La Plata.

Colina La Ciénaga: Su nombre se debe a que hace unos cincuenta años existió por esos sitios una laguna que servía para lavar ropa y bañarse, pero que cuando llovía torrencialmente todo el sector se convertía en toda una ciénaga entre barro, agua y monte. Se comenta que en un principio existían allí caimanes, babillas, animales silvestres de monte y hermosas garzas y pájaros picoteando en busca de comida.